Love to dance
Dancing Through Life: More Than Just Movement, It’s an Artful Expression
“We can’t choose the music that life gives us, but we can choose how to dance to it.”
Quienes abrazan el mundo de la danza habitan un espacio dominado por el movimiento. Es principalmente a través del movimiento, y el cuerpo entero, que perciben la realidad y establecen sus relaciones. Su procesamiento espacial tiene ya siempre ritmo y musicalidad, la sensibilidad se abre de manera distinta. Así, el arte de la danza es un estilo de vida, una práctica sensible en permanente actividad. Al adentrarse en un momento reservado para la danza, esa disposición se amplía y sus posibilidades parecen infinitas. La danza se convierte en una puerta de entrada para experimentar la vida de manera encarnada, conectando con múltiples emociones, sentimientos e ideas.
Entre las diferentes áreas artísticas o creativas quizás sea en la danza en la que más mujeres se han destacado. Bailarinas y coreógrafas como Josephine Baker, Isadora Duncan, Pina Bausch, Aurélie Dupont o Alicia Alonso, han dejado un legado único. Desde niñas, muchas mujeres nos hemos visto cautivadas por la danza, desde coreografías improvisadas frente al espejo (o Tik-tok) hasta lecciones de ballet, flamenco, jazz o danza contemporánea. Pronto aprendimos que, a diferencia de lo que generalmente se pensaba, la danza tenía mucho menos que ver con lo que se esperaba de nuestra apariencia física como con un sentimiento especial de la música, el ritmo, el espacio y el movimiento. Esos espacios de danza también se convierten en espacios de encuentro, donde nos vinculamos con otras mujeres y participamos del desarrollo de nuestra fuerza individual y colectiva.
A través de la danza se puede generar un sentido fuerte de sororidad y queda claro que alcanzar los propios sueños requiere del apoyo y acompañamiento de otras. La confianza en una misma y el amor propio surgen de espacios en los que todas se apoyan y se animan a enfrentar los desafíos que se van presentando. Es por ello que muchos se refieren a la danza como curativa, liberadora y generadora de felicidad.
Por estas razones cada vez se le ha ido a la danza y el movimiento una mayor importancia dentro del currículo escolar, resaltándose la importancia de esta disciplina en el desarrollo integral de mujeres y niñas. Más allá del mero reconocimiento, la danza ofrece experiencias enriquecedoras que contribuyen al crecimiento emocional. A través de la danza muchas personas se embarcan en un viaje transformador con potencial de impactar a otros y otras, enseñándole a la sociedad maneras distintas de conectar con otras personas y con el mundo.
Entre las diferentes áreas artísticas o creativas quizás sea en la danza en la que más mujeres se han destacado. Bailarinas y coreógrafas como Josephine Baker, Isadora Duncan, Pina Bausch, Aurélie Dupont o Alicia Alonso, han dejado un legado único. Desde niñas, muchas mujeres nos hemos visto cautivadas por la danza, desde coreografías improvisadas frente al espejo (o Tik-tok) hasta lecciones de ballet, flamenco, jazz o danza contemporánea. Pronto aprendimos que, a diferencia de lo que generalmente se pensaba, la danza tenía mucho menos que ver con lo que se esperaba de nuestra apariencia física como con un sentimiento especial de la música, el ritmo, el espacio y el movimiento. Esos espacios de danza también se convierten en espacios de encuentro, donde nos vinculamos con otras mujeres y participamos del desarrollo de nuestra fuerza individual y colectiva.
A través de la danza se puede generar un sentido fuerte de sororidad y queda claro que alcanzar los propios sueños requiere del apoyo y acompañamiento de otras. La confianza en una misma y el amor propio surgen de espacios en los que todas se apoyan y se animan a enfrentar los desafíos que se van presentando. Es por ello que muchos se refieren a la danza como curativa, liberadora y generadora de felicidad.
Por estas razones cada vez se le ha ido a la danza y el movimiento una mayor importancia dentro del currículo escolar, resaltándose la importancia de esta disciplina en el desarrollo integral de mujeres y niñas. Más allá del mero reconocimiento, la danza ofrece experiencias enriquecedoras que contribuyen al crecimiento emocional. A través de la danza muchas personas se embarcan en un viaje transformador con potencial de impactar a otros y otras, enseñándole a la sociedad maneras distintas de conectar con otras personas y con el mundo.
Bailando a través de la vida: Más que solo movimiento, es una expresión artística
“No podemos elegir la música que nos da la vida, pero sí podemos elegir cómo bailar con ella.”
Quienes abrazan el mundo de la danza saben que las dificultades del día a día se disipan en el momento en que entran al estudio. Al conectar con su cuerpo sus mentes se abren de maneras distintas y sus perspectivas acerca de las cosas cambian. Es por ello que esta es una práctica que todos y todas podemos abrazar y de la que podemos encontrar grandes beneficios. El movimiento puede convertirse en una extensión de nuestro cuerpo que nos permita avanzar con un ritmo positivo y liberador.
A continuación te presentamos a algunas de las bailarinas que en la actualidad lideran el mundo de la danza local, quienes nos comparten acerca de su disciplina, su recorrido hacia el amor propio, la responsabilidad y la excelencia. Así, les dedicamos esta edición a las bailarinas que han cautivado escenarios de Guatemala y que nos inspiran a través de su danza.
Fotografías por: David Santiago @dropsofmind
Paulina del Valle
A Vision Of Ballet Elegance
Paulina del Valle encontró en la música clásica, que descubrió desde pequeña gracias a su abuela, un mundo amplio de posibilidades. Esto la llevó al ballet clásico, práctica que ha cultivado con gran amor y disciplina. Obtuvo su primer papel solista a los nueve años, un momento que transformó su percepción sobre lo que podía llegar a ser como bailarina. Después de años entrenando con los mejores maestros de danza en Guatemala, se trasladó a los Estados Unidos. Participó en el St. Augustine Ballet Academy para perfeccionar su estilo y habilidades, las cuales hoy comparte con otras en Dance Center, su academia de danza.
Paulina no solo es bailarina, también es maestra. Su experiencia en Dance Center, la academia fundada por Antonio Luissi y ella misma, refleja la importancia de la conexión personal al enseñar danza. Dance Center se posiciona como un espacio para la formación de mentes y almas exitosas, cumpliendo el propósito de plasmar la trayectoria de Antonio y Paulina en la próxima generación de bailarines y bailarinas de Guatemala.
En el corazón de la historia de Paulina está la danza, una fuerza que le ha brindado estabilidad y satisfacción a lo largo de su vida. Su viaje, lleno de desafíos y recompensas emocionales, es un ejemplo que sigue evolucionando. Paulina mira hacia el futuro con determinación, consciente de que en el ballet clásico, la danza no tiene límites.
Paulina González
Tapping through this world
Paulina González es una apasionada bailarina de tap y muchas otras disciplinas. Además, es maestra en Unlimited Dance Academy. Nació en una familia donde la danza siempre estuvo presente y creció compartiendo el amor por el baile junto a su hermana y su madre en la academia. Ha dedicado la mayor parte de su vida al arte del baile.
Paulina se convirtió en la bailarina más joven de la academia a los tres años, comenzando su formación con el tap. Aunque su madre nunca la presionó para unirse al mundo del baile, Paulina se adentró voluntariamente en este apasionante universo.
A los doce años Paulina tomó un rol más activo al convertirse en asistente en la academia y, posteriormente, en maestra. Cada uno de estos roles ha contribuido a su sentido de pertenencia y crecimiento personal. Para ella, Unlimited Dance Academy no es solo una escuela de baile; es una familia que siempre está creciendo.
El baile, para ella, no solo es una actividad física, sino una herramienta para comprender su fuerza y fragilidad. Considera que el baile, al igual que cualquier deporte en equipo, proporciona valiosas lecciones de vida, enseñando el trabajo en equipo y fortaleciendo la autoestima.
Paulina tiene más de doce años de experiencia en competiciones nacionales e internacionales. Como equipo dentro de Unlimited, han obtenido numerosos premios, incluyendo primeros lugares, premios especiales y puntuaciones casi perfectas en competiciones internacionales. A nivel nacional, han ganado el mejor baile en la competencia durante once años consecutivos, entre otros reconocimientos. Personalmente, logró el tercer lugar como solista y obtuvo primeros lugares en las categorías de duo o trío. Además, ha recibido becas a nivel internacional, incluida una beca especial otorgada por un profesor de la convención.
La comunidad que se forma en el mundo del baile es algo que considera incomparable. Asegura que ninguna otra disciplina crea la misma conexión entre personas. Las amistades que ha forjado a lo largo de su carrera son, para ella, únicas e invaluables. Como maestra de baile, encuentra una alegría particular al compartir su pasión con sus estudiantes.
Su historia refleja cómo el baile puede ser, más que una forma de arte, una fuerza que empodera y une.
Isabel Ulloa
From Guate to the world in dancing shoes
Isabel Ulloa ha conquistado el mundo de la danza a través de muchos estilos pero su favorito es el latino/ballroom. Su talento, disciplina y entrega son una inspiración para muchas personas. Isabel demuestra que es posible equilibrar con éxito sus estudios universitarios con su carrera en el baile. Su conexión con la danza comenzó a florecer a la temprana edad de tres años, cuando se unió a la academia tras los pasos de su madre Raquel Ríos, la directora de Ríos Dance. Desde entonces, su amor por la danza ha crecido hasta convertirse en una verdadera pasión.
Como la primera guatemalteca en tener un solo y la primera en obtener el primer lugar en competiciones internacionales, su trayectoria ha sido excepcional. Sus logros en el escenario la llevaron a obtener becas en prestigiosas universidades y ha competido durante casi nueve años a nivel mundial, clasificando como una de las mejores bailarinas. Su experiencia incluye colaboraciones con renombrados coreógrafos y participación en programas de televisión como Abby Lee Dance Company y MADhouse.
La danza, para Isabel, va más allá del éxito en competiciones; es una forma de vida, terapia y escape. Desde los catorce años comparte y enseña a otras personas cultivando amistades duraderas. La academia Ríos Dance se ha convertido en un referente con cuatro sedes en Guatemala, llegando a la competencia mundial de danza, The Dance Awards.
Para Isabel, la danza no es solo un deporte, es una forma de empoderar a las mujeres. Proporciona una plataforma para expresarse, fortalecer el cuerpo y la mente, y construir una comunidad solidaria que celebra los logros individuales y colectivos. Su trayectoria en el mundo de la danza refleja no solo el éxito en el escenario, sino también el impacto positivo que la danza puede tener en la vida de las personas.
Mariana González
Mariana and the fierceness of Jazz
A sus dieciséis años, Mariana González es ya un referente en el jazz y otras disciplinas. Como parte de la Unlimited Dance Academy, Mariana se prepara para graduarse el próximo año, pero su historia con el baile se remonta a sus primeros años de vida. Desde pequeña, Mariana tuvo claro que dedicaría su vida al baile.
Desde los tres años, Mariana incursionó en el mundo del baile con clases de tap y jazz, aunque inicialmente este último estilo no captó su interés. Fue solo al crecer que lo redescubrió, convirtiéndose en su expresión artística favorita. La academia Unlimited es, dice, su segundo hogar pues no solo pasa allí la mayor parte del día sino que también encuentra en las demás bailarinas un espacio que la acoge, la comprende y la apoya. Por esto Mariana también dice que su academia no es solo un lugar para aprender baile sino una escuela de vida. La importancia de ser buenas compañeras, trabajar duro, tener disciplina y responsabilidad, son valores que van más allá del escenario. Además, no solo baila por sí misma; encuentra inspiración en sus compañeras y se esfuerza por transmitir su conocimiento para ayudarlas a crecer, tanto en el ámbito artístico como en lo profesional.
Por otro lado, para Mariana la danza no es solo una expresión estética, sino también un canal para liberar emociones. La coreografía se convierte en su forma de comunicarse sin palabras y enseñar a otras personas se ha convertido en una pasión. Junto a Unlimited ha participado en numerosas competencias llegando a obtener numerosos premios y reconocimientos. En Guatemala, junto con sus compañeras de baile, ha ganado el premio al mejor baile en la competencia durante once años consecutivos.
En una frase, Mariana resume su trayectoria y filosofía de vida: “Lo que una se propone, lo puede lograr”. Mariana González, con su pasión por el jazz y su compromiso con la enseñanza, es un ejemplo inspirador para quienes comparten su amor por el baile y el arte en general.
Sofía Ulloa
The ambassador of Contemporary Dance
Sofía: A passionate journey with dance
Sofía Ulloa ha dedicado casi quince años de su vida al arte del baile. Desde sus primeros pasos en el mundo de la danza, hasta convertirse en una respetada maestra en la academia Ríos Dance, Sofía ha alcanzado un nivel superior en su área..
Se sumergió en el fascinante mundo del baile desde los tres años sin imaginar la trascendencia que tendría en su vida. Sofía describe el baile como una terapia que la libera de las preocupaciones diarias. A lo largo de los años, ha descubierto en la danza innumerables beneficios: desde aprender a luchar y ser constante hasta desarrollar una confianza y determinación inquebrantables.
Con más de 50 competiciones y convenciones en su historial, Sofía ha acumulado numerosos logros, incluyendo el de ser la primera guatemalteca en obtener la nota perfecta como solista y la codiciada beca para Best Dancer. Además, su rol en la comunidad del baile ha evolucionado, pasando de estudiante a maestra y coreógrafa. Sofía comparte su experiencia y pasión con otras, inspirándose en la creatividad y talento de sus compañeras.
El baile es más que una expresión artística, es una terapia que aumenta la autoestima y proporciona una sensación única de libertad y felicidad. Pertenecer a una comunidad de apasionadas bailarinas crea lazos fuertes, ofreciendo un refugio donde se comparten experiencias significativas.
Sofía Ulloa, con su extraordinario viaje en la danza contemporánea, se destaca como una figura inspiradora en la comunidad del baile. Su dedicación, logros y la capacidad de transmitir su pasión a las generaciones futuras la convierten en una embajadora excepcional de la danza y un ejemplo a seguir para aquellas mujeres que buscan encontrar su propio camino en el mundo del arte y la expresión personal.